La innovación en medicina es un proceso constante y está en continua evolución. En el campo de la cirugía, los cambios más importantes en los últimos años están relacionados con la cirugía mínimamente invasiva (CMI), en la que la cirugía robótica ha introducido numerosas innovaciones.
Gracias a ellas, los cirujanos tienen a su disposición herramientas como la realidad aumentada, los filtros de luz o la visión 3D. Estos robots quirúrgicos sustituyen las manos y ojos del cirujano, incrementando la precisión, mejorando la visión o la sensación táctil, etc.
La importancia de la medicina robótica se ratifica en sus numerosas ventajas: reduce el trauma quirúrgico, disminuye las complicaciones de las heridas (infección, dehiscencia, etc.), reduce de la duración de la hospitalización, con la consecuente temprana incorporación a la vida habitual del paciente y la mejora de la estética de la cicatriz quirúrgica, entre otras.
Hablar de cirugía robótica es hablar, en la mayor parte de los casos, del Sistema quirúrgico Da Vinci®, diseñado por Intuitive Surginal y aprobado por la Food and Drug Administration (FDA) desde el año 2000 para la cirugía general. Se calcula que este dispositivo desarrollado originalmente por la NASA ha asistido en más de 3 millones de intervenciones quirúrgicas en todo el mundo desde el año 2000. Se trata de un robot autómata que da notables ventajas a los cirujanos permitiendo optimizar el rango de acción de la mano humana, reduce el posible temblor y perfecciona todos los movimientos del cirujano. Así mismo, se minimizan las posibilidades de error en relación a otras técnicas quirúrgicas.
La denominación de “robot” puede dar lugar a un error de concepto, ya que estos instrumentos no actúan de forma autónoma, sino que son manejados en un sistema “maestro-esclavo”, ya que tiene que estar manipulado por un cirujano en tiempo real. En España, se operaron los primeros pacientes mediante este sistema a partir del año 2006, y desde entonces, gracias a sus ventajas, es una tendencia futura en todas las especialidades.
El proceso de aprendizaje para que un cirujano pueda emplear la cirugía robótica se compone de varias fases, y se necesita una acreditación específica. En el caso del sistema Da Vinci, en primer lugar se obtiene un conocimiento del robot y se desarrolla la destreza con el mismo, además se aprende a partir de cirujanos ya formados, y en segundo lugar tiene cuatro fases de aprendizaje: conocimiento del sistema y sus aplicaciones, con sesiones de formación práctica en centros acreditados, acompañamiento por parte de cirujanos robóticos experimentados durante los primeros casos, y, por último una formación específica en centros que existen en todo el mundo, con el fin de facilitar la progresión a nuevos procedimientos.
Algunas de las acreditaciones o certificados que se deben tener son:
- Online Training Module dV Xi, System for Surgeons (P4/P4b)
- Navigating to the Xi Video Portal: Instructions on how to navigate to the Xi Video Portal for training.
- Basics of Electrosurgery: This module is optional training for those interested in the basics of Electrosurgery.
- Xi Surgeon Assessment: Assesses the surgeon’s understanding of the da Vinci Xi Surgical System upon completion of the system modules.
- Off-Site Training program in the use of the da Vinci Surgical System as a Console Surgeon. Este programa consiste en una serie de sesiones de aplicación de habilidades didácticas y prácticas para el uso del sistema quirúrgico da Vinci y de los instrumentos EndoWrist®. Además, se realiza un laboratorio de capacitación que utiliza el sistema quirúrgico da Vinci para las habilidades técnicas clave del sistema como cirujano de la consola. Se enfatizan los roles del equipo quirúrgico, las responsabilidades y el manejo del Sistema Quirúrgico da Vinci.
La acreditación final para el uso del robot Da Vinci es otorgada por el propio hospital.